Mi Ángel y tu demonio…
Creer en ángeles
es fascinante…
Esa
posibilidad “celestial” que una legión de estos míticos personaje te protejan a
toda hora del día… y por la noche el tan llamado ángel de la guarda, sea quien
custodie nuestros sueños…
Es fascinante
pensar en esta posibilidad; Pero como dicen “Donde hay una posibilidad caben
todas”….
¿Que sería
del bien sin su contra parte. El mal?
En ocasiones
sentir que tenemos una conciencia que piensa como ángel y también como demonio
no está lejos de la realidad.
Aunque
asistas a la iglesia más carismática y cantes los sones de Marcos Witt o Adrián
Romero, en el día a día siempre despertara en ti ese lado oscuro... ese otro yo
que siempre está guardado y solo de ratos lo dejas salir a que haga de las
suyas…
No podría imaginarme
a una pareja de amantes en una tanda de sexo duro y salvaje; sin que saquen de
ellos ese lado oscuro y fuerte, esa caja de pandora que todos poseemos... esa habitación
hallada en nuestros corazones y en nuestro sentir y que solo es abierta en
momentos especiales.
No podría imaginarme
una agresión verbal o física sin antes abrir esa caja negra que hay dentro de
ti.
En las
relaciones de amor y fraternidad ya sea con nuestros hermanos, primos o amigos;
en algún momento hemos llegado a una discusión, que si son vistas con la cabeza fría…
realmente no valdría la pena comenzar discutir;
Somos sobre cogidos por el orgullo,
la rabia o el ego y terminamos en una discusión de días, semanas , meses e
incluso años.
Por tonterías
que toman fuerza en nuestras vidas dejamos de disfrutar de mejores y bellos
momentos…
Moraleja: “Nada
vale una pelea y muchas veces es mejor dejar que descanse ese lado oscuro que
posiblemente posees”
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